LA PARADA HISTÓRICA: L.A.C.A.

Os presentamos a continuación, el tercer podcast de La Parada Histórica. Para la ocasión hemos elegido un programa tan significativo como el celebrado el 7 de enero del año 2006, acto fundacional de un organismo que nunca existió, la L.A.C.A.

¿Y por qué motivo hemos elegido este programa, y en qué consiste el mismo con un nombre tan bizarro? Bueno, en primer lugar, porque es posiblemente uno de los programas más corrosivos e irreverentes de la historia de La Parada. En él lo formal es casi inexistente pero lo que se dice y se habla, aunque está mal que yo lo diga, es auténticamente genial y brillante.

Hay que tener en cuenta el contexto en el que se grabó, que fue tras la reciente muerte por entonces del Papa católico, Juan Pablo II y tras haber elegido a su sustituto, Benedicto XVI, lo cual generó un encendido debate entre los creyentes y no creyentes sobre hacia donde se dirigía la Iglesia. A nosotros de algun modo nos afectó la onda o pedo expansivos, y decidimos realizar en directo el acta fundacional de una organización virtual que nunca existió ni existirá,  la L.A.C.A., Liga Anti Católica. Se contó con la presencia en el programa de los Padres Fundacionales de la misma como si fuera una Constitución verdadera: FreakMan, como moderador de dicho debate; Travis, nuestro taxista favorito que trajo la crítica del pueblo llano del suburbio; desde la Roma más antigua, Pilatus nos habló desde el lado más académico-histórico razonando porque la religión católica es y sigue siendo dañina y perjudicial; y desde el lado más castizo de la intelectualidad de la piel de toro, B. (, nos castró los principales “puntos” de la religión católica.

Aunque este programa es una frivolité auténtica y un caos como decíamos antes, podemos escuchar en él alguno de los momentos más increibles y agitadores que hayáis escuchado en vuestra puta vida en la radio. Es imposible que despeguéis los oidos del aparato receptor, como me ha recordado más de un oyenye que lo escuchó en su momento en directo tras haber pasado los años.
Hay que tener en cuenta, que para poder crear una “institución” de este tipo y para hablar de algo tan trascendente como es la religión, el estado de los Padres de dicha constitución debía ser altamente etílico, como se muestra el cada vez mas bukowskiano discurso que van tomando las disertaciones, entre lo brillante y lo soez, en un descenso absoluto a los infiernos y a la desnudez absoluta en el fin de fiesta.
Además, lo que se prometía como una puesta en escena en la que los discursos girarían en torno a una idea o fin común, casi acaba como el rosario de la aurora entre alguno de los miembros. Aunque pretendíamos la creación de un arma con el que luchar juntos, casi acabamos a hostias entre nosotros, hablando en plata.

Entretenimiento asegurado, amiguitos, no os lo perdáis.

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