EL HIJO PRÓDIGO

       “Creando escuela a la manera de Nick”.

Esa es en mi opinión la mejor manera en la que se le puede definir a Nicolas Cage, el legítimo hijo pródigo de Hollywood. Se supone que un hijo pródigo es aquel hijo que según la teología judeo-cristiana, vuelve al seno familiar tras ser perdonado por el Pater Familias por haberse descarriado su camino, y haberlo encontrado de nuevo más tarde para volver a ser aceptado.

Pero como oveja descarriada, es como más nos gusta a nosotros Nick, sin lugar a dudas. No todo el mundo puede decir que aparte de tener el apellido real Copolla detras del nombre de Nicolas, pueda presumir de un currículum cinematográfico tan apabullante. También tiene la gloria vanal, de haber conseguido lo que para muchos es la consagración definitiva en forma de premios de la academia.

Pero Nick desde bien jovencito, queria marcar la diferencia y que no le dijeran lo que tenia que hacer con su vida. Eso sí, el tenía claro que queria ser actor, bueno o malo, eso ya lo juzga cada uno, pero desde luego, exuda celuloide por los poros. Como esos actores a los que me gusta compararle como son John Travolta, Charlie Sheen, o Robert Downey Jr., que parece que están hechos de otra pasta y que a muchos nos son más simpáticos por lo cercano y mundanal que nos parece su forma de ser dioses dentro y  fuera de la pantalla. En ambas vidas, beben alcohol y drogas, dicen tacos sin ruborizarse, tienen vidas personales truculentas, a pesar de que en cuando se ilumina el foco de una camara, es como si recobrasen nueva vida y son capaces de hechizarnos con su unica manera de captar nuestra atención.

Pero por encima de todos ellos, está Nick, no hay otro igual. Es mi actor favorito por estas y muchas razones, no por ser el mejor actor, ni el que me gustaria ser a mi, ni porque crea que es el tipo de actor masculino que represente todos los valores que creo que debe representar el actor perfecto. No, es porque no cumple ninguno de ellos, porque hace y hará, lo que le salga de la polla siempre, por eso sobre todo, es mi ídolo.

Es conocido que la crítica le adoptó y quiso que fuera el nuevo Al Pacino, debido a su procedencia y condición italo-americana. Pero no, el prefirió tirar por otros registros, sobre todo de cine de género, lo que le hizo ser denostado por muchos que antes le habian alabado,  pero que, afortunadamente, nos ha dado a los frikardos como yo muchas alegrias a lo largo de los años. Él podría haber sido si hubiera querido seguir los pasos que le querían marcar, el actor más importante de su generación, y simplemente, quiso hacerlo a su manera. Fijaros lo que conlleva renunciar a algo tan goloso y apetecible, algo para lo cual él ha más que demostrado que tiene talento suficiente para llevarlo a cabo. Pero afortunadamente para nosotros, lo ha logrado, pero a su manera.

Porque representa sin pretenderlo ser, la imagen de loser, de outsider, pero que al final termina triunfando y lograr lo que quiere. Porque es la imagen de alquien que no quiere dejarse influir por lo que le rodea, por un mainstream inquisidor imperante que marca fuertemente la linea a seguir si no quieres estar fuera del circuito. Porque a él le dio igual  haber sido el centro de los dardos de la crítica implacable, y a pesar de todo, seguir haciendo aquello que más le gusta, es decir, cine. Creo que es un soñador, y que ha logrado hacer algo sobre lo que tengo sana envidia: ser un frikardo y lograr vivir de ello. Para mi es un placer poder dedicarle este especial, a Nicolas Cage, aquel con el que guardo algo muy especial en común: mi amor incondicional por mis pasiones.