PUNTOS DE EXPERIENCIA

    “No es malo hacerse mayor, siendo consciente de          lo que ello significa”.

Ese es el título de uno de los comics guionizados y publicados no hace mucho tiempo por la editorial Dibbuks, por uno de los invitados que tenemos el placer de recibir hoy en nuestro circo ambulante, el guionista barcelonés Josep Busquet. La premisa de la que parte es muy asumible para muchos de los que tenemos cumplida la treintena de años, a esos “Peter Pan” como nosotros que nunca asumimos la edad y las responsabilidades que conlleva la vida adulta.

Y por eso, por no asumir nunca esas responsabilidades, siempre seremos unos inadaptados y seremos criticados por otras generaciones que nos preceden (e incluso en casos, también las que nos suceden, que tampoco entienden que a unos “viejos” les puedan gustar las mismas cosas que a ellos). El hecho es que hemos creado un mundo absurdamente complejo, en el que nos esclavizamos a la propiedad y a unos trabajos horripilantes, que no nos dejan disfrutar de lo que realmente es importante para nosotros, es decir, de nuestro tiempo libre.

Así, muchos nos situamos en la adultez de sopetón y sin prepararnos para ello adecuadamente, después de estar enfocando nuestra vida en nuestra infancia y adolescencia hacia una formación erróneamente dirigida hacia una vida laboral que no se adapta a nosotros, por culpa de un sistema defectuoso, que no dirige bien las aptitudes y las vocaciones, y que provoca muchas frustraciones y desencantos en el camino. En mi caso, es algo que está a medias, porque afortunadamente, cuento con La Parada de los Monstruos y a vosotros al otro lado para ponerle remedio y como brebaje que me restaura puntos de vida, ya que también tengo uno de esos curros horripilantes que me los resta por el otro.

Creo que eso es lo que hace que seamos seres tan ambiguos y peculiares los de mi generación, y por eso me gusta observar y contrastarlo tanto con los que me preceden y me suceden, porque en ese contraste encuentro muchas respuestas, y sobre todo, mucho ánimo para seguir adelante con mis aficiones.

Cada vez que nos hacemos mayores, y vamos asumiendo por ello, más responsabilidades, nos va quedando menos tiempo para disfrutar de manera plena el ejercicio de nuestro tiempo libre. Yo, por ejemplo, desgraciadamente ya no tengo tiempo para jugar una campaña de juego de rol con mis amigos con el tiempo que se requiere. Pero lo sustituimos por juegos más frugales pero intensos, y que quitan menos tiempo, como son el Hero Quest, el Descent o el Arkham Horror. No es una experiencia tan plena como el “rol” real, pero sí que emula salvando las distancias, una experiencia intensa y cooperativa en menos tiempo, con menos esfuerzo y exigencia por parte de mis colegas y yo, que desgraciadamente nos vemos en muy pocas ocasiones a lo largo del año.

Por ello, esta sección de Trazos, y por ende, La Parada de los Monstruos, al igual que lo que creo que hace Josep Busquet con este comic, es dar a entender que el tránsito a la vida adulta no es fácil, pero es llevable si se asume lo que cada uno es, o al menos esa es mi lectura, aunque tendremos oportunidad a lo largo de la entrevista que realizaremos durante la segunda hora de nuestro programa, de que nos desvele estos y otros misterios de su obra.En definitiva, la vida es eso al fin y al cabo, ir acumulando puntos de experiencia que te hacen que la vayas afrontando del modo más digno posible con el perfil de personaje que te ha tocado en lid vivir, y las cartas que te va dando las circunstancias vividas a modo de dado de mil caras, para jugarlas lo mejor posible. El resultado, como en esos juegos de rol que tanto