NO SIN MI IPAD

Ser cool, no es cosa fácil.

¿Quién puede haber sido tan inhumano de cometer un acto tan atroz, alguien capaz de cometer un crimen tan injustificado como execrable? Cualquiera que halla sufrido en sus carnes un hecho tan violento como este, sabe de lo que estoy hablando, y os pongo unos ejemplos de ello: esas llaves que no encuentras por ningun sitio cuando llegas a casa a las 10 de la mañana de un domingo despues de haber estado de farra, y que seguro que alguien te ha robado; ese coche que no encuentras en el aparcamiento del centro comercial porque seguro que tambien te lo han robado. Es decir, crímenes que deberían ser considerados lesivos de la humanidad.

Narraba Annie a los medios cómo se habían producido los hechos, y que éstos se habían producido mientras se disponía a desembarcar del crucero Ave Barcelona-Madrid en la madrileña Estación de Atocha. Al ir terriblemente cargada con el equipaje, instrumentos, y un pesado premio que le había otorgado recientemente la Junta de Andalucia, debido a un resbalón fue a parar de bruces con el mullido y rasposo suelo del vagón del tren del que se disponía a salir, aterrizando en el con estrépito. Mientras, ella se disponía a levantarse por si sola ante la indiferencia de las personas que la rodeaban (algo execrable hoy en dia, no ya por ser una diva del indie, si no sobre todo, por ser una persona al fin y al cabo), cayó en que algo la faltaba. ¡¡¡Dios Santo, su IPAD ya no estaba con ella!!!

Un momento terrible, no me quiero poner en la piel de Anni, el sentir que todo el mundo se te viene encima cuando pierdes parte de ti, parte de lo que significa molar más y tener un producto de la manzana que ya forma parte de ti como icono de la modernez de la piel de toro. Pues resulta que con toda lógica, se resolvió de manera muy natural, ya que lo moderno llama a lo moderno.